Considero necesario iniciar este post con aclaraciones importantes sobre “Rosh Hashaná”, para evitar confusiones con respecto a la infinidad de información que podemos encontrar en la Web sobre el tema…
Cuando hablamos de este evento, primero que nada Rosh HaShaná no es el “año nuevo judío”, no existe tal cosa desde la perspectiva de la Kabbalah ya que la Kabbalah no es una religión. Tampoco se refiere a una “celebración”, como la que se lleva a cabo el 31 de Diciembre en el calendario gregoriano; Rosh Hashaná es “UNA VENTANA CÓSMICA”, una abertura que permite la entrada de energía para un uso determinado, que en este caso tiene que ver con “el inicio de un nuevo ciclo de 365 días”. Como bien lo dice la traducción del nombre en hebreo Rosh HaShaná = Cabeza de Año, puede considerarse el “Año Nuevo”, pero nunca una celebración tal cual estamos acostumbrados a realizar regularmente cada vez que termina el mes de Diciembre.
En un post anterior, les compartí la explicación, significado e importancia de las ventanas cósmicas, si no lo has leído puedes hacerlo “AQUÍ”.
¿Por qué cuando nos referimos a Rosh HaShaná no hablamos de celebrar el nuevo año?
La explicación tiene que ver con el trabajo que venimos a realizar a este mundo con cada una de nuestras encarnaciones… La Kabbalah es clara, dura y directa: No venimos a pasear ni a descansar!, al habernos enrolado en esta escuela cósmica nos comprometimos a venir a aprender, trabajar constantemente en nuestra espiritualidad para poder aprender a manifestar o crear vidas plenas conectadas a La Luz, aprender todo sobre el funcionamiento de La Creación y hacernos expertos en ello. Para eso es necesario experimentar la vida, lo que nos puede llevar muchas encarnaciones y dependerá de nuestro empeño y esfuerzo que la experiencia que tengamos mientras aprendemos sea cómoda o complicada.
Todos venimos a este mundo con un “Tikún” que significa “Corrección”, es nuestra tarea específica en cada encarnación, es como un problema a resolver que se nos entrega para encontrarle solución mientras transitamos por esta vida. El “Tikún” tendrá que ver con aquello que se nos dificulte aprender en cada encarnación, como una materia que se nos complique de manera que si no logramos ganarla satisfactoriamente la llevaremos como materia pendiente o retrasada en la siguiente encarnación. Podemos descubrir nuestro Tikún por medio de la Astrología Kabalística, guiándonos por el signo LuniSolar con el que nacimos actualmente podemos hacer el rastreo correspondiente para conocer la materia que tenemos que aprobar para poder avanzar al siguiente nivel sin pendientes.
“Vivir la vida tiene como objetivo hacerlo de forma consiente y plena”
Pero lograrlo requiere muchísimo esfuerzo y trabajo de introspección constante. Por ello cuando hablamos de la “Cabeza del Año” no estamos hablando de celebraciones como tal, la realidad es que no tenemos tiempo de celebrar cuando hay mucho trabajo importante por hacer!!!
¿De qué se trata?
Empecemos por el principio:
Rosh HaShaná es uno de los días más complejos y con mayor potencial de transformación del año. Lamentablemente muy pocas personas comprenden su significado y se pierden en la distracción de la celebración con los amigos y familia, la preparación de la cena y la práctica de los rituales en conjunto.
Veamos un poco más profundo…
Existen 12 meses en el calendario Kabbalístico el cual se compone así:
- Nisán (Aries)
- Iyar (Tauro)
- Siván (Géminis)
- Tamuz (Cáncer)
- Av (Leo)
- Elul (Virgo)
- Tishrei (Libra)
- Jeshván (Escorpio)
- Kislev (Sagitario)
- Tevet (Capricornio)
- Shvat (Acuario)
- Adar (Piscis)
Como podemos ver el primer mes del calendario es “Nisán”, pero Rosh HaShaná, la cabeza del año es en el mes de “Tishrei”, el séptimo mes. Esto es algo confuso y contradictorio porque nos están diciendo que el año comienza en el séptimo mes y no en el primero… ¿qué significa esto?
Recordemos que la Kabbalah es un sistema de códigos que se requieren ser conocidos para poder ser entendidos. La clave que se encuentra en los meses es la siguiente:
Los meses del año según el “Calendario LuniSolar de la Kabbalah” existen desde el inicio de la Creación, no son un invento posterior del hombre ni originario de ninguna religión. Conforme los eventos cósmicos que se presentan en cada uno de los meses, así es la energía que tenemos disponible para utilizar a favor en nuestra vida. Las historias y eventos que nos cuenta la Torah y nos explica la Kabbalah no son eventos históricos, en realidad son eventos que año con año se repiten, como un LOOP CÓSMICO, en el que repetimos la historia en un intento de liberarnos finalmente y de una vez por todas para darle fin a esta historia de escalvitud y pasar al siguiente nivel de evolución espiritual.
Examinemos un poco algunos de los meses para entender un poco más…
Nisán, el mes de Aries (Marzo – Abril) es el primer mes del calendario desde el momento en que el pueblo hebreo salió de Egipto (Egipto es el código que utiliza la Torah para referirse al EGO) y se liberó de la esclavitud, encaminándose a la “Tierra Prometida” que en realidad significa la “Libertad o Despertar de Consciencia”. Cada vez que le damos vuelta al calendario y regresamos a Nisán, experimentamos la energía de liberación de nuestro propio Egipto, tenemos la oportunidad de liberarnos si aún no lo hemos logrado para ir en busca de nuestro despertar y ser libres de la esclavitud que nos impone el EGO.
Por otro lado Av, el mes de Leo (Julio – Agosto) es el mes en el que tenemos la Ventana Cósmica de Tu B´Av, “El día del Amor entre las Almas Gemelas”, que se lleva a cabo el 15 de Av, en este día tenemos disponible la energía que creó a las Almas Gemelas, una energía muy poderosa tomando en cuanta que es la energía que creo a las Almas que bajarían por separado a experimentar la vida al mundo y que estarían destinadas a reunirse gracias al llamado de la misma energía que las creó; energía muy poderosa que existía aún antes de que la misma creación se llevara a cabo.
Lo que nos lleva a Elul, el mes de Virgo (Agosto – Septiembre) que es el mes en el que La Creación dio inicio en el día 25 como está registrado en el primer capítulo de Génesis, pero La Creación no empieza a funcionar hasta el 6to. día, con “La Creación del Hombre”…
Y así 6 días después del inicio de La Creación llegamos a Tishrei, el mes de Libra (Septiembre – Octubre) es el séptimo mes del calendario y fue en el 1er. día de este mes en el que se creó a Adam y Havá (Adán y Eva), los primeros humanos (pronto dedicaremos un post a ellos).
Y así inció la vida en El Mundo y podemos empezar a entender de qué se trata el evento de Rosh HaShaná, ya que prácticamente se nos explica que estamos a punto de experimentar la energía que se nos dio la primera vez que existimos en La Creación como humanidad, es un RESET PARA EL ALMA. Podríamos decir que prácticamente esta ventana nos da el poder de regresar nuestra configuración a valores de fábrica; con lo que podemos retomar nuestra tarea sin todos los distractores, caos, errores, contaminación y heridas que nos cargan la mochila de “Karma”, retrasándonos en lo que venimos a realizar como estudiantes a este mundo.
Prácticamente nos inscribimos a una carrera de 12 vidas, según nos marca la Rueda Zodiacal con sus 12 Signos. Se supone que deberíamos de haber experimentado cada Signo del Zodiaco, aprender de toda la energía del Cosmos que aportan los planetas en cada uno de lo signos y graduarnos al llegar a Piscis para luego salir de este plano físico libres de EGO en camino a una dimensión superior de regreso a casa para ejercer en base a lo aprendido durante nuestra carrera aquí en la Tierra, el Reino de Maljut, según el Árbol de la Vida.
Peeeeero, Oh! sopresesa… cada signo nos está tomando más de una vida encarnada, la mayoría de nosotros tenemos más de 1500 vidas experimentadas en este plano y seguimos contando, acumulando Karma y tratando desesperadamente de encontrar la forma de vivir una vida plena.
Rosh HaShaná es una oportunidad muy grande de empezar de nuevo de cero e intentarlo de nuevo para hacerlo mejor que la última vez durante los próximos 12 meses.
La religión se ha ocupado de poner los distractores…
“Después de todo recordemos que una cosa es ser Judío y otra muy muy diferente es ser Israelita”.
(Encuentra más info sobre la diferencia entre ser Judío e Israelita, así como el significado de esto… “AQUÍ”)
En la actualidad la comprensión de Rosh HaShaná es errónea y no capta la verdadera esencia del evento. La verdad es que para la mayoría de las personas, el único significado de este día es celebrar el evento como una reunión de familia y amigos para compartir una hermosa cena festiva y darle cierre a un año más, aunque esto implique haber tenido una vida llena de dolor y caos.
Pero esta ventana cósmica va mucho más allá de un evento familiar para celebrar, los Kabbalistas nos enseñan que en el día de Rosh HaShaná no deberíamos reunirnos a celebrar en familia, seria mejor que la familia estuviera dispersa llevando a cabo su conexión por separado, sobre todo si no hemos sido conscientes d realizar los ajustes y el trabajo necesario para corregir la negatividad en nuestra vida, puesto que en este día el Satán (EGO) tiene el poder y la autorización del Creador para clasificar libremente a todo aquel individuo que encuentre y que tenga suficiente energía negativa que vibre en la misma frecuencia que él. Recordemos que el Satán también se alimenta de Luz y lo hace de nuestra Luz, aquella que nosotros no aprovechamos ni cuidamos sabiamente cuando vibramos negativamente.
Cuando una familia en la que la negatividad es en cantidad importante, se reúne para “Celebrar” Rosh Hashaná, en realidad le esta haciendo una invitación VIP al Satán para encontrar a todos los miembros de la familia en el mismo lugar y a la misma hora y de esta forma determinar la toma de su Luz sea mucha o poca, para alimentarse un año más a sus expensas. Y nuevamente se experimentará un año mas de caos, dolor, tristeza y en pocas palabras “muerte” para esta familia.
Esta perspectiva puede sonar muy radical, dura o dramática y va muy en contra de la tradición aceptada por el judaísmo y los conversos.
¡Pero la Kabbalah no es una tradición!
La tradición de las fiestas sugiere una falsa interpretación de la Torah, basada en la religión; y aunque muchas personas se han opuesto a la Kabbalah y al punto de vista de los Kabbalistas, lo cierto es que Rosh Hashaná es un evento cósmico que se viene llevando a cabo desde siempre, con o sin la existencia de religión, reuniones familiares y cenas pomposas espectaculares.
La Película de nuestra vida está a punto de ser filmada…
Para entender mejor la Ventana Cósmica de Rosh HaShaná, podemos decir que en este día, se produce y se graba la película de vida de cada persona, y que se proyectará en sus pantallas los próximos 365 días. Esta puede ser una completamente nueva o una secuela de la anterior, lo cual no es problema si se tratara de una buena, pero para aquellos que han tenido malas películas de vida, resulta una perpetuación del sufrimiento.
Según la Kabbalah, todas nuestras acciones y elecciones se preparan y se nos dictan por adelantado. Esto puede sonar a película de terror, cuando pensamos que realmente no tenemos elección en nuestras propias vidas y que estamos destinados únicamente a representar un guión pre establecido. Pero en realidad podemos ser nosotros mismos quienes escribamos el guión, lo produzcamos y lo actuemos… Esto, si somos conscientes de ello; de lo contrario quien ejecuta el guión y la película completa es el EGO y entonces sí estaremos desdichadamente destinados a lo que se nos indique que nos toca vivir.
Muy pocas personas intentan cambiar su guión de vida, modificando sus hábitos dañinos para bien. Lograr el cambio verdadero no sólo requiere fuerza y voluntad, propósito y perseverancia, sino también el conocimiento de cómo llevarlo a cabo… y para ello tenemos las herramientas de la Kabbalah.
¿Entonces qué pasa en Rosh HaShaná?
En este día todos los seres humanos, sin importar su procedencia, cultura, religión, raza, sexo, creencias o estilo de vida, tiene la oportunidad de colocar sobre la “Balanza del mes de Libra” todos sus atributos positivos y negativos, puede medir el nivel de sus acciones emitidas en el ciclo que termina, es una especie de auto evaluación que muchos podrían catalogar como “juicio”, dejando en claro que no habrá ningún persona que haga de juez sobre nosotros más que nosotros mismos y nuestro EGO. Dependiendo del peso que se muestre en dicha balanza, así serán los efectos que se manifestarán en el año por venir.
Por ello, en el mes de Elul (Agosto – Septiembre), que es el mes en curso y que está por terminar, se nos dan las herramientas energéticas necesarias para poder terminar de corregir y enmendar todo aquello que no habíamos puesto en orden durante el año. Es como una oportunidad de entregar el trabajo retrasado y llegar lo más liviano posible a Rosh HaShaná para poder hacer un RESET y empezar de cero.
¿Cómo hacemos el reset?
Rosh HaShaná es el día uno de diez días en los que formatearemos nuestro sistema espiritual por completo, “esto si somos conscientes y estamos dispuesto a ello”.
Entre Rosh HaShaná y la siguiente Ventana Cósmica mayor de “Yom Kipur”, tenemos 10 días conocidos como los “Yamim Noraim”/ días terribles, estos diez días corresponden a las 10 Sefirot del Árbol de la Vida que a su vez corresponden a los 10 aspectos que componen a cada sistema espiritual completo.
Estos 10 días son días de rigor, días dedicados a la limpieza espiritual de raíz para finalmente lograr el RESET COMPLETO en los 10 aspectos que conforman nuestra consciencia, ya que si queremos lograr aniquilar por completo las fuerzas destructivas en nuestra vida, necesitamos más de un día.
El primer día de Rosh HaShaná conectamos con “Kéter”, la primera Sefirá, traducida como “La Corona”. Luego cada día que pasa hasta Yom Kipur se revelarán aspectos “NEGATIVOS” de la consciencia para poder ser erradicados de raíz. Cada uno de los “Yamim Noraim” conectará con una Sefirá del Árbol que ser irá purgando y purificando de la negatividad con la que le hemos contaminado durante nuestra experiencia de vida.
Ahora bien!, para no extenderme aún más, porque sé que esta información puede ser compleja… en un próximo post ampliaré más la información que corresponde a los 10 días de los Yamim Noraim y la Ventana de Yom Kipur.
Como les comenté al inicio, esta semana tenemos mucho trabajo por hacer, así que estén pendientes de las próximas publicaciones para que pueda conocer toda la información y ponerse manos a la obra. Una vez más les deseo determinación, fortaleza y valor para permanecer firmes ante sus metas y recuerden que…
“En el conocimiento está la conexión”
La Tefa.-
Reblogueó esto en Israel y Oriente Medio.